Crianza por primera vez
Si nota que su hijo tiene ojos llorosos, podría deberse a varias razones. La epífora o tener los ojos llorosos es una afección común en los bebés y, afortunadamente, es inofensiva. Podría deberse a conductos lagrimales bloqueados, infecciones o alergias. Como padre, debe asegurarse de que los ojos de su bebé se mantengan limpios y saludables mientras tanto. Sin embargo, en algunos casos, los síntomas asociados con ojos llorosos pueden indicar complicaciones graves. Y uno debe consultar a un pediatra. Este artículo le ayudará a comprender las causas, los tratamientos y los riesgos relacionados con los ojos llorosos en los bebés.
¿Qué Significa si Su Bebé tiene los Ojos Llorosos?
Si su bebé tiene ojos llorosos (o la afección epífora), entonces sus ojos deben estar llorosos (o segregando lágrimas) constantemente o en cantidades excesivas. De vez en cuando, es posible que veas lágrimas corriendo por su cara también. Esta afección podría haber sido provocada por una reacción alérgica, infecciones o obstrucción de los conductos lagrimales.
Causas de Ojos llorosos en bebés
Aunque la epífora no es tan grave y se transmite por sí sola. A veces, también puede indicar numerosas afecciones médicas. Estas son algunas de las razones más comunes de los ojos llorosos en los bebés.
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Sobreproducción de lágrimas
La irritación ocular a menudo es responsable de la secreción de lágrimas excesivas de los ojos para eliminar el irritante. Los irritantes oculares incluyen humo, polvo, polen, suciedad, arena, etc. Además, afecciones como la conjuntivitis, la triquiasis y el ectropión pueden irritar los ojos de su bebé. Asegúrese de que su bebé no se frote los ojos demasiado, ya que esto podría empeorar la inflamación y provocar una sensación de ardor.
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Infecciones
Las infecciones como la conjuntivitis también pueden provocar epífora en los bebés. Puede ser causada por virus, hongos, bacterias o incluso alergias. La conjuntivitis ocurre cuando un virus (o una bacteria, aunque menos común) entra en el ojo. Esta afección es extremadamente contagiosa y puede contagiarse a otras personas en su familia si no se toman precauciones. Otra infección es la blefaritis, que se produce debido a la obstrucción de las glándulas sebáceas debajo de los ojos. Estas infecciones pueden provocar síntomas graves, como hinchazón, ardor, dolor y pérdida de pestañas en casos extremos.
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Conductos lagrimales bloqueados
Su bebé también puede tener ojos llorosos debido a un conducto lagrimal bloqueado. Los conductos lagrimales son los responsables de drenar el líquido de los ojos para que no se acumulen. Sin embargo, si los conductos lagrimales de su bebé están bloqueados, el sistema de drenaje puede funcionar mal, causando que las lágrimas se acumulen en los ojos de su bebé y fluyan lentamente por su cara. También puede observar secreción blanca, enrojecimiento o hinchazón en las esquinas superiores de la nariz de su hijo.
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Alergias
Su bebé también puede tener ojos llorosos o rojos debido a la conjuntivitis alérgica. La fiebre del heno, también conocida como rinitis alérgica, también puede causar una reacción alérgica en los ojos, que puede hacer que los ojos se le hagan agua. Algunos síntomas de la rinitis alérgica incluyen secreción nasal, estornudos, congestión nasal, etc. Tenga cuidado con estos síntomas y lleve a su hijo al médico de inmediato.
Tratamiento
Aquí hay algunas opciones de tratamiento disponibles para deshacerse de los ojos llorosos durante este tiempo.
- Si la afección no es tan grave, todo lo que puede hacer es esperar a que se trate por sí sola.
- Limpie los ojos de su bebé con algodón y agua filtrada para evitar la acumulación de cualquier secreción, ya que podría provocar infecciones.
- Masajee el conducto lagrimal unas cuantas veces al día con una presión leve; ayudará a liberar cualquier obstrucción, permitiendo que el conducto se desarrolle completamente. Este método se conoce como ordeño.
- El uso de medicamentos antibióticos para los ojos también puede ayudar a aliviar los síntomas que podrían ser causados por infecciones.
- Use gotas para los ojos que contengan antihistamínicos para combatir los síntomas de las reacciones alérgicas.
- Lave los ojos de su bebé bajo la guía de un oftalmólogo pediátrico para eliminar cualquier irritante.
- Si un virus causa ojos llorosos, es posible que tenga que esperar alrededor de una semana para ver si desaparece. Si no es así, consulte inmediatamente al pediatra de su hijo.
¿Debe optar por Remedios Caseros para Epífora?
Puede considerar remedios caseros para los ojos llorosos de su bebé si su médico le da el visto bueno o si los ojos de su hijo, aunque están llorosos, son blancos y no están irritados. Si los ojos de su hijo están llorosos debido a un conducto lagrimal bloqueado, le sugerirá que masajee los ojos de su bebé para ayudarlo a abrirlos. El tratamiento de los ojos llorosos en bebés también se puede hacer en casa para aliviar la incomodidad que experimenta su hijo. También puede probar compresas frías y calientes para aliviar el bloqueo del conducto lagrimal y eliminar la costra tóxica que se acumula alrededor de los ojos. También puedes usar una bolsita de té caliente para calmar la inflamación y el dolor de los ojos. La manzanilla y la menta son los mejores resultados en el tratamiento de la epífora.
Cuándo visitar a un médico
Si su hijo tiene los ojos llorosos, pero sus ojos se ven claros y blancos, y si no muestran ningún signo de molestia, puede cuidarlos en casa, pero si observa alguno de los siguientes síntomas, visite a su pediatra de inmediato.
- Inflamación o enrojecimiento en o alrededor de los ojos.
- Secreción verde amarillenta que forma costras duras alrededor de los ojos.
- Su bebé se frota los ojos continuamente o muestra malestar.
- Su bebé es sensible a la luz y prefiere mantener los ojos cerrados.
- La forma de los párpados de su bebé no es como se supone que debe ser.
La epífora es una afección común en los bebés, por lo que no necesita preocuparse. Sin embargo, si hay más agua de lo normal junto con otros síntomas, consulte con el médico de su bebé, quien realizará un examen detallado y sugerirá posibles opciones de tratamiento. Asegúrese de seguir al pie de la letra las instrucciones del pediatra y de cuidar bien a su bebé. ¡Pronto se sentirá mejor!
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Este post fue modificado por última vez el 31 de julio de 2020 10:17 am