Infección congénita por VIH-1

Este artículo incluye una discusión sobre la infección congénita por VIH-1, la infección por el virus de inmunodeficiencia humana-1, el síndrome de inmunodeficiencia adquirida pediátrica, el SIDA pediátrico y la infección por VIH-1 adquirida verticalmente. Los términos anteriores pueden incluir sinónimos, trastornos similares, variaciones en el uso y abreviaturas.

Descripción general

La infección congénita por VIH es la transmisión del VIH-1 de madre a hijo, que ocurre durante o poco después del nacimiento. La prevalencia actual oscila entre el 1% y el 2% en los Estados Unidos con la implementación exitosa del tratamiento antirretroviral de las madres durante el embarazo. Este artículo incluye una descripción general de la infección congénita por VIH-1 con criterios actualizados sobre la reducción de la transmisión durante el embarazo y el proceso de parto, las pruebas para el diagnóstico y el tratamiento en recién nacidos, incluido el uso de profilaxis con zidovudina.

Puntos clave

• La infección congénita por VIH es la transmisión maternoinfantil del VIH-1.

• La prevalencia es de 1 a 2% en los Estados Unidos con el inicio del tratamiento antirretroviral de las madres durante el embarazo.

• La enfermedad puede ser leve o severa, incluyendo infecciones recurrentes y anomalías neurológicas.

* Todos los lactantes con exposición al VIH deben recibir profilaxis con zidovudina entre 6 y 12 horas después del parto.

* Se han actualizado las pautas para las pruebas para recién nacidos y se incluyen para su revisión.

Nota histórica y terminología

En 1982, poco después de las descripciones iniciales del SIDA en hombres homosexuales, haitianos, hemofílicos y consumidores de drogas intravenosas, los CDC informaron de 4 niños con inmunodeficiencia inexplicable e infecciones oportunistas (Centros para el Control de Enfermedades, 1982). No fue hasta el año siguiente, sin embargo, que las características clínicas e inmunológicas del SIDA pediátrico se describieron en la literatura (Oleske et al 1983; Rubinstein 1983).



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