Retraso del crecimiento intrauterino (RCIU): epidemiología y etiología

El retraso del crecimiento intrauterino (RCIU) se debe principalmente a una desaceleración patológica en el ritmo de crecimiento fetal, lo que resulta en un feto que no puede alcanzar su potencial de crecimiento. La frecuencia del RCIU variará en función de los criterios de discriminación adoptados. Es extremadamente importante utilizar gráficos de crecimiento fetal locales o nacionales para evitar algunos factores de confusión. La incidencia de RCIU en recién nacidos estaría entre el 3% y el 7% de la población total. En nuestra experiencia es del 5,13%, cifra similar a la obtenida por otros autores, pero con una incidencia progresivamente mayor durante la última década. Existen múltiples factores maternos que, en general, pueden agruparse en factores constitucionales y generales, ya que afectan a la edad, el peso, la raza, el volumen cardíaco materno, etc., factores socioeconómicos con incidencia clave en el nivel nutricional de la madre, donde un bajo nivel de nutrición materna sería el factor clave en este grupo. Hemos evaluado múltiples factores como posibles contribuyentes al riesgo de RCIU: raza, edad de los padres, estatura (cm) de la madre, peso de la madre al nacer y antes del embarazo (kg), aumento ponderal y presión arterial durante el embarazo, y recién nacidos PEG previos. También se evaluaron factores socioeconómicos como la clase social, la profesión de los padres, la residencia habitual, el salario, la inmigración y la dieta. También se incluyeron variables como el tiempo total de trabajo diario y el tiempo que las madres pasaban de pie, el tiempo diario de sueño (hrs), la prueba de autopercepción del estrés en el trabajo y la edad de primiparidad. Factores tóxicos durante el embarazo: consumo de tabaco (activo y pasivo), alcohol, drogas y café. Se consideraron factores fetales o útero-placentarios. En nuestro estudio, los factores etiológicos más significativos fueron: el consumo activo y pasivo de tabaco, el nivel de estrés de la madre, el aumento del total de meses trabajados durante el embarazo, el total de horas de trabajo diarias y el tiempo que las madres pasaron de pie y, finalmente, la altura de los padres. Nuestros datos apoyan el objetivo principal de reducir la incidencia de recién nacidos PEG después de RCIU luchando contra el tabaco de todos los campos, incluido el hábito de fumar pasivo, y mejorando las condiciones laborales de la madre embarazada, reduciendo el número de horas diarias trabajadas, la actividad física y tratando de evitar y hacer frente a situaciones estresantes.