Tectónica de placas

La tectónica de placas es una teoría científica que explica cómo se crean las principales formas de relieve como resultado de los movimientos subterráneos de la Tierra. La teoría, que se solidificó en la década de 1960, transformó las ciencias de la Tierra al explicar muchos fenómenos, incluidos eventos de construcción de montañas, volcanes y terremotos.En la tectónica de placas, la capa más externa de la Tierra, o litosfera, formada por la corteza y el manto superior, se rompe en grandes placas rocosas. Estas placas se encuentran encima de una capa de roca parcialmente fundida llamada astenosfera. Debido a la convección de la astenosfera y la litosfera, las placas se mueven entre sí a diferentes velocidades, de dos a 15 centímetros (de una a seis pulgadas) por año. Esta interacción de placas tectónicas es responsable de muchas formaciones geológicas diferentes, como la cordillera del Himalaya en Asia, la Falla de África Oriental y la Falla de San Andrés en California, Estados Unidos.La idea de que los continentes se movían con el tiempo había sido propuesta antes del siglo XX. Sin embargo, la comunidad científica se dio cuenta en 1912 cuando un científico alemán llamado Alfred Wegener publicó dos artículos sobre un concepto llamado deriva continental. Sugirió que hace 200 millones de años, un supercontinente al que llamó Pangea comenzó a romperse en pedazos, sus partes se alejaban unas de otras. Los continentes que vemos hoy son fragmentos de ese supercontinente. Para apoyar su teoría, Wegener señaló formaciones rocosas coincidentes y fósiles similares en Brasil y África Occidental. Además, América del Sur y África parecían encajar como piezas de rompecabezas.A pesar de ser descartada al principio, la teoría ganó fuerza en las décadas de 1950 y 1960 a medida que los nuevos datos comenzaron a apoyar la idea de la deriva continental. Los mapas del fondo oceánico mostraban una enorme cordillera submarina que casi rodeaba toda la Tierra. Un geólogo estadounidense llamado Harry Hess propuso que estas crestas eran el resultado de rocas fundidas que se elevaban desde la astenosfera. Al llegar a la superficie, la roca se enfrió, formando nueva corteza y separando el fondo marino de la cresta en un movimiento de cinta transportadora. Millones de años después, la corteza desaparecería en las fosas oceánicas en lugares llamados zonas de subducción y volvería en ciclo a la Tierra. Los datos magnéticos del fondo oceánico y la edad relativamente joven de la corteza oceánica respaldaban la hipótesis de Hess de la propagación del fondo marino.Hubo una pregunta persistente con la teoría de la tectónica de placas: La mayoría de los volcanes se encuentran por encima de las zonas de subducción, pero algunos se forman lejos de estos límites de placas. ¿Cómo podría explicarse esto? Esta pregunta fue finalmente respondida en 1963 por un geólogo canadiense, John Tuzo Wilson. Propuso que las cadenas de islas volcánicas, como las islas Hawaianas, se crean por «puntos calientes» fijos en el manto. En esos lugares, el magma se abre camino hacia arriba a través de la placa móvil del fondo marino. A medida que la placa se mueve sobre el punto caliente, se forma una isla volcánica tras otra. La explicación de Wilson dio más apoyo a la tectónica de placas. Hoy en día, la teoría es casi universalmente aceptada.



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