Tumores del Seno Paranasal

Un tumor del seno paranasal es un cáncer que ha crecido dentro de los senos paranasales, los espacios abiertos detrás de la nariz.

Este tumor puede comenzar en las células de las membranas, los huesos o los nervios que recubren el área. Es posible que no sepa o ni siquiera sospeche que un tumor está creciendo hasta que se disemina. Cuanto antes reciba un diagnóstico y comience el tratamiento, mayores serán las probabilidades de vencer al cáncer.

Causas de los tumores del seno paranasal

No todos los tumores del seno paranasal tienen causas conocidas, pero estas son posibles causas de los tumores del seno paranasal:

• Exposición a productos químicos industriales

• Infección con el virus del papiloma humano (VPH)

• Exposición a polvo de madera, cuero, harina, textil, níquel o cromo

• Exposición al radio

• Fumar cigarrillos

Síntomas

Los primeros síntomas de los tumores del seno paranasal son similares a los síntomas de resfriados o infecciones, por lo que a menudo se los olvida:

• Obstrucción de los senos paranasales o congestión que nunca desaparece

• Cambios en la voz o la respiración

• Reducción del sentido del olfato

• Dolores de cabeza

• Entumecimiento o dolor en la cara, los oídos o los dientes

• Dientes que se aflojan

• Pus que drena de la nariz o goteo posnasal

• Hemorragias nasales frecuentes

• Crecimiento en la cara o el paladar

• Ojos que riegan continuamente

• Ojos abultados

• Pérdida o cambio de visión

• Problemas para abrir su boca

Llame a su médico si tiene alguno de estos síntomas.

Diagnóstico

Por lo general, un médico tomará su historia clínica y le hará un examen físico. El examen físico incluirá observar sus ojos, oídos, nariz, boca, cara, cuello y garganta. Cualquier detalle que pueda proporcionar sobre cualquier dolor que esté teniendo puede ayudar con el diagnóstico. Esto incluye detalles como si el dolor es agudo, ardiente, sordo o adolorido, dónde se encuentra y cuándo se produce.

Su médico podría ordenar una endoscopia de los senos paranasales. Este es un procedimiento en el que se inserta un tubo delgado con una luz diminuta y una cámara de video en el extremo en los senos paranasales. Observar el interior de los senos paranasales ayudará al médico a determinar la ubicación y el tamaño del tumor.

Su médico también podría ordenar estas pruebas:

• Análisis de sangre

• Pruebas de diagnóstico por imágenes de su cráneo, como radiografías, tomografías computarizadas o RMN de los senos

• Pruebas de diagnóstico por imágenes de su tórax

• Una biopsia, donde se extrae una pequeña muestra de tejido del tumor y se examina en un laboratorio para detectar signos de cáncer

Estadificación

Parte del proceso de diagnóstico se denomina estadificación. Esto le dice a su médico qué tan avanzado está el cáncer y si se ha diseminado a otras partes de su cuerpo. La estadificación ayuda a su equipo médico a crear el mejor plan de tratamiento para usted.

El estadio del cáncer depende de dónde se encuentre el tumor, cuánto ha crecido en áreas cercanas, si se ha diseminado a los ganglios linfáticos u otras partes del cuerpo y algunos otros factores de salud. Los estadios van del I (estadio más temprano) al IV (el más avanzado). Los estadios de los tumores del seno paranasal son:

• Estadio I. El tumor está contenido en el seno y no se diseminó.

• Estadio II. El tumor se diseminó a otras partes del seno sinusal.

• Estadio III. El tumor se diseminó hasta el hueso de los senos paranasales o la cuenca del ojo y es posible que se haya diseminado hasta un ganglio linfático.

• Estadio IV. El tumor se diseminó más profundamente en la cuenca del ojo, en el cerebro o en otras partes del cráneo y el cuello, y posiblemente a partes más distantes del cuerpo, y puede tener una presencia más grande en los ganglios linfáticos.

Tratamiento

El enfoque más común para tratar un tumor del seno paranasal es una combinación de cirugía y radioterapia. El objetivo de la cirugía es extirpar la mayor cantidad posible del tumor. Si el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos, serán eliminados. La cirugía se planificará para preservar la mayor parte de su rostro y función posible. La cirugía puede ser compleja y puede involucrar a una variedad de especialistas, como médicos especializados en oído, nariz y garganta (otorrinolaringólogos u otorrinolaringólogos), neurocirujanos y cirujanos maxilofaciales.

Se puede administrar radioterapia antes de la cirugía para intentar reducir el tamaño del tumor. O se puede administrar después de la cirugía para destruir cualquier célula cancerosa restante. En este caso, por lo general, comenzará varias semanas después de la cirugía para dejar tiempo suficiente para que su cuerpo sane. La radiación también puede ser el tratamiento principal en algunos casos, por ejemplo, si una persona no puede someterse o no quiere someterse a una cirugía.

La quimioterapia es el uso de medicamentos que destruyen las células cancerosas. A menudo se usa para cánceres que podrían reaparecer o que han reaparecido después del primer abordaje de tratamiento. El uso de quimioterapia se determina caso por caso. Es posible que te administren una combinación de medicamentos de quimioterapia o una combinación de quimioterapia y radiación, llamada quimiorradiación.

El tratamiento también incluirá el control del dolor. Informe a su médico o enfermero si siente dolor para que pueda controlarlo mejor.

Complicaciones

Los tumores del seno paranasal y su tratamiento pueden llevar a estas complicaciones:

• Cicatrices de la cirugía

• Cambios a largo plazo en la visión, la respiración, el habla, la masticación o la deglución, causados por el tumor o la cirugía

• Daño a los nervios que puede afectar la sensibilidad en la cara y el movimiento en la cara, los hombros o los brazos

• Efectos secundarios de la radioterapia, como dolor, náuseas, dificultad para comer, llagas en la boca, pérdida de dientes y cambios en el gusto

• El cáncer que se disemina a otras partes del cuerpo (metástasis)

Las personas que reciben tratamiento para tumores del seno paranasal deben continuar reuniéndose regularmente con sus médico. Si el cáncer regresa, es más probable que ocurra en los primeros años después del tratamiento.